Guillermo Acevedo Gómez, abogado y líder social en el suroccidente de Barranquilla, llegó este viernes a Medicina Legal para realizar los trámites para la entrega del cuerpo de su hijo Luis Guillermo Acevedo Herrera, quien fue asesinado la noche anterior en el barrio El Valle de Barranquilla.

"Estaba en mi casa cuando me entró una llamada de la suegra de él que lo habían baleado en su casa, ubicada en la calle 70C con con carrera 18, gritaba pidiendo auxilio, que subiera con una ambulancia, que a mi hijo lo habían matado. Yo fui corriendo y cuando llegué ya no lo encontré allí", dijo Guillermo.

Su hijo había sido llevado al Camino Adelita de Char, pero allí llegó sin signos vitales.

"Lo que fui escuchando es que él se aprestaba para irse para mi casa, en el barrio Nueva Colombia, y cuando se montó en la moto le apareció un pistolero por la espalda y le disparó en dos ocasiones", contó su papá.

En ese momento tenía Luis Guillermo a su hijo de 4 años delante de él en la moto, pero cuando sintió los disparos el joven corrió buscando refugio en casa de su suegra. El niño resultó ileso y logró correr, pero Luis Guillermo fue alcanzado de nuevo por el sicario y le disparó en cinco ocasiones más hasta dejarlo tendido en el suelo.

Es allí cuando el sicario, posteriormente, huyó en una moto que era conducida por un cómplice.

"No tenía problemas, no tenía antecedentes. Mi hijo era un hombre de buen perfil, estudiante universitario, a punto de cumplir sus 20 años el día 22 de enero. Buen amigo, hombre alegre. Ninguna clase de problemas tenía. Estudiaba administración financiera", indicó el progenitor del joven.

Guillermo insistió que su hijo era un buen joven. 

"El último de mis seis hijos,  tenía una sonrisa para todo el mundo. Tenía su carácter, era un hombre amable y cariñoso, era un buen hijo con un proyecto de vida. Trabajó dos años en una empresa de apuesta y ahora estaba en una empresa de servicios públicos. Me arrebataron parte de mi vida", precisó.

El líder social hizo un llamado a la Policía para que el crimen de su hijo no quede impune.

"Este baño de sangre que hay en la ciudad tocó a mi puerta y que no me lo vayan a encasillar en las frías estadísticas de un caso más y que se investigue, que no vaya a quedar impune su muerte", puntualizó.